martes, 26 de enero de 2016

Tu ya no estás

Y todo sucedió tan de repente.
Tu y yo peleados.
Mi orgullo impidiéndome pedir perdón.

La culpa fue mía, me alejé. Me alejé demasiado esta vez.
Pero creía firmemente que vendrías a buscarme; como siempre lo has hecho, como siempre lo hemos hecho.
Uno detrás del otro, continuamente.

Pero todos nos cansamos algún día ¿no? Y este debió ser el tuyo.
No viniste a buscarme, no saliste corriendo tras de mi, no agarraste mi mano cuando solté la tuya, no. No lo hiciste.

Pero yo tampoco me quedé, no dejé de correr y volví, no me aferré a tu mano, no.
No lo hice.

Y ahora con solo un recuerdo, todos mis sentimientos - si, esos que estaban dormidos y encerrados bajo siete llaves - salen y cobran vida. 

¿Ves lo que eres capaz de hacer?
Ella quiere ser tan tu, y yo quiero ser tan yo, que no hay nada que pueda hacer.
Irónico destino. Tu tienes la música, pero yo tengo las palabras, las malditas palabras.

No me quedé y tu no viniste y mis miedos se han hecho realidad de golpe.
Ahora abril solo viene a recordarme que tu no estás.

Tu ya no estas, joder, tu ya no estas.

jueves, 7 de enero de 2016

Soledad

La vi marchar, corriendo bajo la lluvia, huyendo del monstruo en que me había convertido. Se paró un momento y se giró. 

Miró hacia la ventana a la que estaba asomado yo. La ventana de nuestra casa, la del hogar donde construiríamos nuestra vida, donde haríamos realidad nuestros sueños.
La casa donde veríamos crecer a nuestros niños. El mayor tendría mi mata de pelo negro, alborotado y la pequeña tendría sus ojos.

Se volvió a girar y continuó corriendo hasta que desapareció entre la gente.
Me hubiera gustado decir que no se porque huyó de mi, pero no sería verdad, me habría engañado a mi mismo.

Al final ella tenia razón, acabé creando otras verdades.Terminé creyendo mis mentiras.